Tus caricias, tus abrazos, tus miradas y tus gestos se van a quedar conmigo siempre. Y me da igual, porque digas lo que digas, por muy orgulloso que seas yo se que tú en el fondo me quieres igual que yo, porque haces lo posible para estar dentro de mi visibilidad.
Cuando me miras mi corazón es como si se encogiera, y lo juro, nunca sentí esto tan fuerte y tan profundo. Me gusta verte sonreír y ver como esos pómulos suben suavemente y unas pequeñas arrugas se forman al final de tus ojos. Me gusta verte despeinado, me gusta verte incluso con un cigarrillo entre esos dedos, los dedos más bonitos que nunca he visto en un chico.
Siempre estaré ligada a ti de alguna forma u otra.
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