Cojamos un billete al país de nunca jamás.

Volemos alto hasta cansarnos de las vistas, vámonos, a despegar, a salir de aquí, a cumplir tus sueños allí en el cielo o en mar. Coge un billete al País en donde los niños son niños, donde no crecen, donde no existe la preocupación, ni el dolor ni el miedo. Allí donde la vida era como antes, sin que las cosas cambiasen tanto, sin que nos creyésemos tan mayores para algunas cosas, y tan pequeños para otras. Allí, vámonos allí donde se puede vivir en libertad pero sin libertinaje, allí donde se puede sentir sin dolor, sin comeduras de cabeza. Vamos que se nos hace tarde, que se nos escapa el vuelo, solamente tienes que cambiar y volver a ser tal vez como eras antes, un niño en uno de esos países imaginarios, que creamos nosotros mismos, un niño en uno de esos países que nos llenarán de vida. Vive conforme a tu edad, no hagas cosas de gente mayor, porque tenemos tiempo para todo y no son dos días como dice la gente. Sabes, que las cosas ahora pintan mal. Gente que pequeña pierde virginidad, gente que bebe, que fuma, que pelea y mata, y a veces pienso, que esto podría ser un mundo lleno de paz y amor, y que solamente tenemos que poner nuestro pequeño granito de arena para intentar cambiarlo. Si vives conforme el plan todo saldrá bien.. Igualdad y amor, paz y armonía tampoco es pedir tanto. Vámonos todos en un vuelo al país de Nunca Jamás, un vuelo de ida pero sin vuelta.